La gestión de la capacidad y el rendimiento de la infraestructura tecnológica es la última etapa del proceso de mejora de la eficiencia de la infraestructura tecnológica de tu empresa. Consiste en gestionar y monitorear el funcionamiento de tu infraestructura tecnológica, asegurando su disponibilidad, su rendimiento, su capacidad, su seguridad y su continuidad, así como proponer e implementar acciones de mejora continua, basadas en el análisis de datos, la retroalimentación y las lecciones aprendidas.
La gestión de la capacidad y el rendimiento de la infraestructura tecnológica se lleva a cabo mediante las siguientes actividades:
1.- Monitorización: se mide, se registra y se reporta el estado y el comportamiento de tu infraestructura tecnológica, utilizando diferentes indicadores, como el tiempo de respuesta, el uso de recursos, el número de incidencias, el nivel de servicio, entre otros. La monitorización se puede realizar mediante diferentes herramientas, como el monitor de rendimiento, el monitor de recursos, el visor de eventos, entre otros.
2.- Análisis: se procesa, se organiza, se clasifica y se interpreta la información obtenida de la monitorización, utilizando diferentes técnicas, como el análisis estadístico, el análisis de tendencias, el análisis de correlación, el análisis de causa raíz, entre otros. El análisis permite identificar los problemas, las causas, los efectos y las soluciones de tu infraestructura tecnológica.
3.- Mejora: se propone, se prioriza, se planifica, se ejecuta y se verifica la implementación de acciones de mejora para tu infraestructura tecnológica, basadas en los resultados del análisis. Las acciones de mejora pueden ser de diferentes tipos, como la optimización, la actualización, la ampliación, la sustitución, la reparación, la prevención, la protección, la recuperación, entre otros.
4.- Retroalimentación: se obtiene, se evalúa y se incorpora la retroalimentación de los interesados sobre el funcionamiento y la mejora de tu infraestructura tecnológica, utilizando diferentes fuentes, como las encuestas, las evaluaciones, los comentarios, las sugerencias, entre otros. La retroalimentación permite conocer el grado de satisfacción, de conformidad, de alineación, de eficiencia y de eficacia de tu infraestructura tecnológica.
5.- Aprendizaje: se documenta, se comparte y se aplica el conocimiento generado y adquirido durante la gestión de la capacidad y el rendimiento de tu infraestructura tecnológica, utilizando diferentes medios, como las lecciones aprendidas, las buenas prácticas, los casos de éxito, los manuales, los cursos, entre otros. El aprendizaje permite mejorar las competencias, las habilidades, las actitudes y los comportamientos de los involucrados en la gestión de la infraestructura tecnológica.
La gestión de la capacidad y el rendimiento de la infraestructura tecnológica te permite asegurar el funcionamiento óptimo de tu infraestructura tecnológica, así como proponer e implementar acciones de mejora continua, basadas en el análisis de datos, la retroalimentación y las lecciones aprendidas. La gestión de la capacidad y el rendimiento de la infraestructura tecnológica es el punto de llegada para lograr una infraestructura tecnológica eficiente.